El aguacate es un súper alimento, nutritivo y saludable, pero a diferencia de algunos otros súper alimentos que son difíciles de consumir, el aguacate es rico y se puede preparar de muchas maneras diferentes. Durante mucho tiempo, muchas personas que contaban las calorías de manera indiscriminada y temían a las grasas, evitaban esta fruta grasa maravillosa. Pero las grasas que contiene el aguacate son saludables y el contar calorías está sobrevalorado.
Aquí tiene algunas buenas razones por las que comer aguacates:
Los aguacates son ricos en carotenoides y también ayudan a su absorción a partir de otras frutas y verduras.
Los carotenoides son pigmentos naturales de las plantas. Son poderosos antioxidantes y algunos tipos pueden convertirse en vitamina A, que es esencial para la salud de los ojos. Los carotenoides son solubles en grasa, por lo que necesitan un entorno de grasa para ser absorbidos. Si usted come un aguacate rico en grasas junto con otras frutas y verduras que contienen carotenoides, el cuerpo será capaz de utilizar mejor esos antioxidantes. El truco está en añadir unas rodajas de aguacate a sus ensaladas.
Los aguacates sacian y ayudan a bajar de peso.
Este hecho podría ser una sorpresa teniendo en cuenta el valor calórico de ésta fruta (la mitad de un aguacate de tamaño medio contiene 138 calorías). Sin embargo, como el aguacate sentir sacia, en realidad se tiende a comer menos. Además, el aguacate contiene ácido oleico, que activa la parte del cerebro responsable de la sensación de saciedad. Lo que es más, la investigación reciente muestra que el consumo de grasas insaturadas saludables puede ayudar con los esfuerzos de seguir una dieta.
Los aguacates son buenos para el corazón y reducen el riesgo de un ataque al corazón.
Los aguacates son una excelente fuente de grasas saludables, impulsan los niveles de colesterol bueno – la lipoproteína de alta densidad o colesterol HDL. Para el HDL, los niveles más altos son siempre bienvenidos. El HDL previene las enfermedades del corazón y el derrame cerebral. Así que si tiene antecedentes familiares de ataque cardíaco, asegúrese de comer aguacates.
Los aguacates reducen los niveles de colesterol malo.
Así como los aguacates aumentan el HDL o “colesterol bueno”, también reducen el colesterol LDL o “colesterol malo”. El ácido oleico ayuda a reducir los niveles de colesterol en general, y particularmente el colesterol LDL dañino, que es el culpable de las enfermedades cardiovasculares. Si está luchando con los niveles altos de colesterol, el aguacate podría ser su salvador.
Los aguacates son ricos en folato y reducen el riesgo de tener defectos de nacimiento.
Esto es particularmente interesante para las mujeres embarazadas, que necesitan tomar suplementos de ácido fólico durante el embarazo. El aguacate es muy rico en ácido fólico – una vitamina que previene los defectos de nacimiento. Una taza de aguacate contiene una cuarta parte de la ingesta diaria recomendada. El ácido fólico es importante para la salud de las células, y evita los cambios celulares que podrían conducir a padecer cáncer, por lo que todo el mundo debería consumir bastante aguacate.
No hay muchos productos químicos que puedan afectar a los aguacates, por lo que son seguros a la hora de comerlos.
Si está preocupado acerca de los pesticidas en los alimentos, le alegrará saber que debido a su piel gruesa, los aguacates son muy resistentes a la contaminación por plaguicidas. Además, los insectos no los atacan tanto, por lo que utilizan menos pesticidas. Los aguacates estaban en la parte superior de la lista de frutas y verduras con menos plaguicidas en el 2014.
Los aguacates tienen propiedades anti-cancerígenas.
Los aguacates contienen gran cantidad de fitonutrientes. Estos aumentan la cantidad de antioxidantes en el cuerpo para combatir los radicales libres, los cuales tienen el potencial de causar daño en las células, incluidos los daños que pueden conducir al cáncer. Los aguacates pueden inhibir el cáncer oral y el cáncer de próstata, así como algunas otras enfermedades malignas.
Los aguacates son una buena fuente de vitaminas y minerales esenciales.
¿Sabía que los aguacates contienen más potasio que los plátanos? También son ricos en vitamina K, vitamina B5 y vitamina B6, y una gran cantidad de vitamina C en el interior de su rica carne. La vitamina C es un antioxidante y es importante para el mantenimiento del sistema inmunológico.
Los aguacates son ricos en fibras dietéticas.
Consumir suficiente fibra es esencial para el intestino y la salud en general. Con el aguacate, el estreñimiento puede convertirse en historia. Las fibras dietéticas también ayudan a reducir los niveles de colesterol y de azúcar en la sangre. Un aguacate contiene casi la mitad de la ingesta diaria recomendada de fibra.
Los aguacates mejoran la función cerebral y podrían ayudar a prevenir la demencia.
¿Quién iba a pensar que comiendo guacamole puede mejorar la función de su cerebro? Bueno, de acuerdo con la investigación, los aguacates superan a los arándanos en cuanto a beneficiar la salud del cerebro. Contribuyen a un flujo sanguíneo saludable y reducen la presión arterial, por lo que el cerebro se nutre sin interrupciones. La presión arterial alta a menudo se asocia con el deterioro cognitivo, por lo que mantenerlo dentro de los valores normales, mantendrá las pequeñas células grises en forma óptima para la vejez.
Los aguacates tienen propiedades anti-inflamatorias.
El aguacate ayuda a prevenir la inflamación en el cuerpo, especialmente los problemas relacionados con la artritis, debido a varios factores. Contiene fitosteroles que son una parte importante de las grasas del aguacate. Estos fitosteroles son importantes para el sistema inflamatorio, ya que ayudan a mantener la inflamación bajo control. También su alto contenido de carotenoides, así como otros nutrientes, es un factor clave de las propiedades anti-inflamatorias de esta fruta.
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